"Cine"
Ignacio Serrano
«Cíclope», su último corto, fue todo un pelotazo. Distribuido por Disney, pudo verse en los grandes cines y recibió la atención de todos los telediarios y periódicos. Pero el director Carlos Morett apunta aún más alto con la continuación de su saga fantástica. La semana pasada estrenó «Morphos», una nueva historia de ciencia-ficción que nace como el primer corto español en 3-D estereoscópico. «Quizá haya alguno más, pero seguro que no de estas características», explica Morett, cuya obra ya ha sido comparada con «Avatar».
«”Morphos” ha costado menos que un día de catering en “Avatar”, pero es una pieza de alta calidad que me llena de orgullo, y creo que tendrá un gran futuro», asegura. El cineasta mexicano-español está estudiando las mejores posibilidades de distribución, pero cree estar «muy cerca de marcar otra jugada como la de “Cíclope”, un corto que cambió la historia del cine español, al ser el primero en salir con 92 copias en 35 milímetros y ser visionado en tantos cines». Con «Morphos», sin embargo, Morett ha renunciado a tanta difusión para preservar la integridad de su película. «Es una decicisón que me va a cerrar puertas, pero quiero que sólo se vea en 3-D. Lo que significa que el 95% de festivales españoles no podrá proyectarlo».
Gran parte del rodaje de «Morphos» se realizó en la Gran Vía madrileña, un lugar que fascina a Morett, donde se organizó un verdadero revuelo cuando se convocaron plazas de extra. «Vinieron 600 personas, fue una verdadera locura», asegura.
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