EXPOSICIÓN | Hasta el 13 de marzo
Efe | París
El dibujante y creador Jean Giraud, conocido como Moebius o Gir, ... creador de formas extraordinarias que exploran el inconsciente humano y el desdoblamiento de su personalidad, ha llegado a París, donde se le dedica la primera gran exposición de su obra.
'Los mundos de Giraud' (Nogent-sur-Marne, 1938) aterrizan en la Fondation Cartier de la capital francesa, con una exposición organizada en esta ocasión en torno al tema de la metamorfosis, sus proyectos cinematográficos y a su primer filme de animación en 3D.
'Le Planète encore' es el título de la película que exhibe la fundación, adaptación de uno de los títulos de Giraud, "resultado de una colaboración inédita a partir de los dibujos del artista".
"Con sus paisajes y sus personajes en transformación perpetua, sus obras exploran los confines del inconsciente y desvelan un mundo imaginario y fantástico", explican los organizadores de la muestra, que estará abierta desde hasta el 13 de marzo próximo.
La exposición propone un repaso de la obra del artista, con planchas originales de sus cómic, pinturas y bocetos y dibujos inéditos que en la planta baja del edificio Cartier se exponen como una tira cómica sin fin que se ondula sobre el suelo.
Al mismo tiempo, comenzó a publicar las primeras planchas de 'Hara-kiri', ya con el apodo de 'Moebius', inspirado en el nombre del matemático y astrónomo alemán que descubrió la cinta de superficie con una sola cara y un solo borde.
Y es que el artista francés ya ha dicho que su identidad, como la de la cinta de Moebius, es doble: "Al pasar de Giraud a Moebius, torcí la cinta, cambié de dimensión. Era el mismo y era otro. Moebius es el resultado de mi dualidad", dijo en una obra publicada en 1999 ('Jean Giraud, Moebius/Giraud: histoire de mon double').
La exposición gira precisamente alrededor de la idea de metamorfosis de la obra de Giraud, que pasa del realismo detallado y minucioso de 'Blueberry' a sus diseños fantásticos, con criaturas híbridas y naves espaciales.
Moebius está en el imaginario colectivo del público cinematográfico de las últimas tres décadas y ha influido de manera determinante en la animación, la ciencia ficción, la publicidad y hasta los videojuegos.
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